Become a Supporter Library Library

BeSiata Dishmaya

¡Judaismo!

Pekudé

4 de Adar II  5760; 11 de Marzo 2000


Contenido:

·  Resumen de la Parashá

·  Comentario a la Parashá

·  Nueva Sección: Preguntas al Rabino

·  Haftará

·  Información sobre la suscripción

·  Or Sameaj en el Web

Esta publicación también esta disponible en los siguientes formatos: [Text][Word][PDF]Explicación de estos símbolos


Resumen de la Parashá

Contenido

El Libro de Shemot concluye con la Parashá Pekudé.  Después de terminar todas las diferentes partes, vasijas y ropas usadas en el Mishkán, Moshé hace un recuento y enumeración completa de todas las contribuciones y de todas las ropas y vasijas que se confeccionaron.  Los israelitas le traen todas las donaciones a Moshé.  El inspecciona todo el trabajo y advierte que todo fue hecho de acuerdo con las especificaciones de D‑os.  Moshé bendice al pueblo.  D‑os habla con Moshé y le dice que el Mishkán debe ser establecido el primer día del primer mes, Nisán. También le explica a Moshé el orden en que se debe montar el Mishkán y todos sus implementos.  Moshé cumple con el mandato del modo prescripto. Cuando el Mishkán por fin queda listo,  con todos los implementos en los lugares correspondientes, desciende una nube sobre el Mishkán, señal de que la gloria de D‑os se posa sobre él. Cada vez que la nube se aleja del Mishkán, los israelitas van tras ella. De noche, la nube es reemplazada por un pilar de fuego.

 




 

Comentario a la Parashá

Contenido

TRAJE TERRENAL

“Estos son los recuentos del Mishkán…” (38:21)

Tu cuerpo es un traje espacial. Permite que tu alma pueda existir en este mundo. Ese es su propósito. Nadie jamás podría confundir al traje espacial con el hombre que se encuentra dentro de el. Antes del pecado de Adam y Java no había vergüenza, por ende no había necesidad de trajes. Ellos percibían claramente que la neshamá, el alma, es la esencia de la persona, y que el cuerpo es solo su “traje espacial”. Sin embargo, luego de su pecado, esta distinción se hizo confusa, y fue necesario mostrar que el cuerpo tiene importancia solo mientras sostenga a la neshamá. Siendo que el cuerpo es visible, el hombre fácilmente se confunde y llega a la conclusión de que debe atribuirle la mayor importancia.

Por esta razón, las ropas, mientras cubran al cuerpo, refuerzan el concepto de que la esencia espiritual interna, la neshamá, que está escondida de la vista, es de significancia esencial.

 

El Midrash (Tanjuma Bamidbar 3) cuento que cuando el Mishkán fue erguido, Hashem Dijo que tzniut (recato, modestia) es extremadamente propio para este lugar. El Mishkán mismo estaba cubierto como una kalá (novia), con un velo en frente y traje con cola detrás. La esencia del Mishkán es la Shejiná, la Presencia Divina, que habita ahí. Si uno ve solamente la estructura gloriosa, atribuyéndoles santidad intrínseca a los materiales mismos, a la vez que olvida la esencia espiritual, el Mishká se convierte en algo muy similar a un ídolo.

Similarmente la Torá ordena un grado mayr de tzniut (modestia) para la mujer judía. En las culturas seculares, la mujeres no son valoradas, y a veces reducidas a simples objetos físicos. Se pone énfasis a lo que el ojo percibe –el traje espacial. La mujer judía, sin embargo, se viste a modo de enfatisar la esencia de su ser interno. “Toda la gloria de la hija del Rey es interna.”

Adaptado de “Outlooks and Insights”, del Rabino Zev Leff

 


ESPEJITO, ESPEJITO...

“El debe hacer el lavabo de cobre… de los espejos de las legiones…” (38:8)

Cuando miras a otra persona, ¿qué ves? Notas todos los defectos de carácter que él tanto trata de ocultar. Cuando miras a otra persona, piensa que estas mirando al espejo. Asi como el espejo nos revela nuestras características fisicas feas, cuando nosotros veamos en otros defectos en sus características personales, debemos revisar esas mismas características en nosotros mismos a modo de erradicarlos. Eso es lo que el dicho quiere decir “¿Quién es sabio? Aquel que aprende de toda persona” (Pirké Avot).

Cuando los kohanim (sacerdotes) se preparaban para el servicio a Hashem en el Mishkán, ellos se lavaban sus manos y pies. En un nivel místico, este lavado era para quedarse ellos mismos limpios de cualquier impureza espiritual, de cualquier defecto, inclinación o parcialidad. El lavabo en el que se limpiaban estaba hecho enteramente de espejos. Ellos recordaban a los kohanim que a modo de distinguir sus propias imperfecciones, ellos debían primero mirar a su vecino – que él sea su espejo espiritual. Ellos debían revisarse esas faltas en el carácter que ellos encontraban en otras personas. Porque si fuera que debian mirarse solo a sí mismos, les sería muy difícil identificar sus propias faltas.

Toldot Yaakov Yosef

Nueva Sección:

??? Preguntas al Rabino ???

 

Bradley de Milton, Massachusetts,  nos escribe:
¿Se puede jugar en Shabat juegos tales como Scrabble™, ajedrez o Monopoly™?  

Steven Edell de Jerusalén nos escribe:

Mis dos hijas, ambas menores de 11 años, hace poco recibieron un juego de Monopoly™ como regalo de Jánuca. Quieren saber si está permitido jugar en Shabat.

 

Balint Nogradi de Iowa nos escribe:

El Shabat pasado estaba leyendo un libro de Michael Jay Katz: Cuentos nocturnos del Shamash. En libro, el shamash dice: “se guiaba por las estipulaciones de Maimónides: nunca jugaba al ajedrez por dinero ni tampoco jugaba en Shabat”. ¿Es verdad que no se puede jugar ajedrez en Shabat?

 

Moti Karta nos escribe:

¿Se puede usar un reloj de cuerda de ajedrez en Shabat?

 

Estimados Bradley, Steven, Balint y Moti:

Comencemos por el Scrabble™. ¿Acaso el formar una palabra colocando letras una junto a la otra en una tabla de Scrabble transgrede la prohibición de “escribir” en Shabat? Además, ya que la gente suele anotar los puntos al jugar al Scrabble, ¿tal vez estaría prohibido jugar por si uno llegara a escribir por accidente? Yo le mostré a Rabí Jaim Pinjas Scheinberg, shelita, una edición de Scrabble que tiene una tabla chata, sin ranuras para las piezas, y le pregunté si está permitido jugar este juego en Shabat. El admitió que algunos Poskim lo prohíben mientras que otros lo permiten. El señaló que está permitido, pero se debe tener mucho cuidado de asegurarse de que los jugadores no se olviden que es Shabat y no escriban los puntos que gana cada uno.

Ahora, en cuanto al Monopoly™. Monopoly es un juego que imita las transacciones comerciales. Rabí Scheinberg, shelita, dice que técnicamente hablando, está permitido, pero que jugar un juego “de negocios” no es conducente a la actitud que se debe mantener en Shabat.

El ajedrez es analizado por el Shulján Aruj. El Ramá menciona que, como pasatiempo, está permitido en Shabat. Sin embargo, algunos poskim sostienen que a fin de diferenciar entre Shabat y los días laborales, hay quienes tenían un juego de ajedrez especial hecho de plata, solamente para jugar en Shabat.

Los relojes de ajedrez son otro tema. Se trata de dos relojes conectados de modo tal que cuando un jugador completa su jugada aprieta un botón, deteniendo su reloj y activando el de su oponente. Rabí Scheinberg shelita determina que está prohibido usarlos en Shabat.

Al jugar todos estos juegos, hay una consideración halájica que no debe ignorarse: la prohibición de Borer. Borer está prohibido cuando uno separa de una pila de otros objetos algo que no tiene intención de usar inmediatamente. Con los juegos que tienen muchas piezas diferentes, esto puede ocurrir a menudo. No hay que separar las piezas cuando se las guarda.

Hasta ahora nos hemos referido  a la “Halajá técnica”. Pero ¿acaso éste es el modo de pasar el tan esperado y querido Shabat? El Shabat puede ser un tiempo bellísimo: cantando zemirot, yendo de paseo, acercándose a los familiares y amigos y, sí, estudiando Torá. Ustedes son los árbitros que deciden: ¿tal vez podrían pasar el tiempo en forma más sabia?

Una vez oí al rabino Dr. Abraham Twerski, shelita, narrar una hermosa historia acerca de una reprimenda que una vez recibió de su santo padre, el Rebe Hornesteipel, zt’’l. El narró esta historia en el décimo aniversario del fallecimiento. Y la narró como ejemplo de reprimenda que deja bien claro lo que quiere, expresando un profundo amor al mismo tiempo. La historia tuvo lugar en Rosh Hashaná cuando Rabí Twerski era un niño pequeño. En su casa paraba un hombre que no sabía mucha Torá y le pidió al pequeño Abraham si quería jugar con él al ajedrez. El niño sintió que seguramente no estaba bien jugar al ajedrez en Rosh Hashaná, pero el hombre le aseguró que no había ningún problema. ¿Qué puede tener de malo un simple partido de ajedrez?. Entonces se pusierona jugar, y el pequeño le dio jaque mate al invitado. Esa noche, una vez finalizado Rosh Hashaná, le dijeron al pequeño Abraham Twerski que su padre quería decirle algo en el estudio. Nervioso, fue a verlo. Su padre, sin quitar los ojos del libro que estaba estudiando, reprendió al niño: “¿Jugaste al ajedrez en Rosh Hashaná?” El tono denunciaba que él sabía que el niño se encontraba en un nivel superior a dicha conducta, y que el padre estaba desilusionado. La reprimenda causó una gran impresión en el niño, quien se sintió profundamente avergonzado. Una vez que el padre estuvo seguro de que había dejado bien en claro su opinión, alzó la vista del libro que estaba leyendo, se levantó los anteojos y con un pícaro brillo en los ojos le preguntó a su hijo: “¿Nu? ¿Ganaste?”

 

Fuentes:

- Shulján Aruj Oraj Jaim 338

- Jayei Adam 38:11

- Halajot de Muktze, cap. 1 nota 24

- Shemirat Shabat Kehiljatá 16:32

 


???¿ALGUNA PREGUNTA?
Si tiene alguna inquietud sobre leyes o costumbres de su judaísmo, o quiere aclarar aulguna duda, puede enviarnos su pregunta a
spanish@ohr.edu y procuraremos contestarle lo más pronto posible. Nos reservamos el derecho de publicar las preguntas y respuestas. No todas las respuestas dadas serán publicadas en "Judaísmo", pero todas serán respondidas, B´H.


 

Haftará

Parashat Shekalim Melajim II

Ashkenazim: “Vatishlam Col HaMelajá” 7:51 – 8:21
Sefaradim: “Vayaas Jirom” 7:40-50

Contenido

Así como la parashá trata de la culminación de los artículos que forman parte del Mishkán, la haftará trata de la culminación del los artículos importantes del Templo que ordenó construir el Rey Shlomó.

El Mishkán (Santuario), que viajó junto al Pueblo Judío durante los cuarenta años que estuvieron en el desierto y finalmente se estableció en Shiló, albergó al Arca Sagrada y demás implementos que se fabricaron bajo la supervición de Moshé Rabenu, hasta la completación e inauguración del Templo en Jerusalem. La haftará describe en detalle la finalización de la elaboración de todos los implementos del Templo por manos de Jiram, un artesano en la fundición de cobre.

Jiram, por amor a la mitzvá que le fue encomendada por el Rey Shlomó, produjo cada pieza, desde las imponentes columnas de la entrada al edificio del Templo (de 36 pies de alto por 7.5 de diámetro, aprox.), hasta las palitas con las que se ha de recoger las cenizas que queden en el altar, todo hecho en puro cobre.

La haftará enfatiza el hecho de que el mismo Jiram se dedicó a elaborar todas las vasijas, en lugar de delegar la labor a subalternos, y alaba su dedicación. Ello le hace merecedor de que a su nombre se le agregue la letra “vav” en el pasuk que habla de la culminación de estas vasijas, llamándole Jirom.

 

“En el valle del Jordán el Rey los virtió…” (7:46)

En el día que habría de fallecer Moshé Rabenu, Hashem le hizo subir al monte Nevó donde le hizo ver toda la extensión de la Tierra de Israel, y donde además le hizo ver proféticamente los acontecimientos mas importantes de la historia del Pueblo Judío hasta la llegada del Mashíaj y la resucitación de los muertos. Una de las escenas que le hizo ver fue el momento en el que el Rey Shlomó llegó al valle del Jodán para presenciar la vertición del cobre fundido en los moldes de los artículos que se confeccionaban para el Beit HaMikdash.

 

¿Por qué le mostró Hashem esta escena a Moshé?

 

El Rey Shlomó tomó el largo e incómodo viaje hasta el valle del Jordán no porque el Rey desconfiara de la capacidad profesional de los artesanos que enconmendó para tal trabajo, por lo cual fue personalmente a presenciar la fundición y vertición. Mas bien su amor a la confección de estos artículos en cumplimiento a la mitzvá de la construcción del Beit HaMikdash lo movió a asistir a su culminación. El Rey Shlomó fue uno de los numerosos tzadikkim que apreciaban el cumplimiento de las mitzvot por encima de toda inconveniencia, y se tomaba la molestia de realizar personalmente los trabajos.

 

Basado en “ The Midrash Says on The Weekly Haftaros”

Escrito y Recopilado por: Rabino Yaakov Asher Sinclair
Editor y Responsable:
Rabino Moshe Newman
Diseño de HTML:
Moises Cohen


Esta y otras publicaciones de Torá (en Inglés) están disponibles en el E-Mail.
Para suscribirse a Judaismo, enviar el mensaje "sub judaismo {su nombre completo}" a listproc@ohr.edu


Or Sameaj es un grupo de Yeshivot y centros de acercamiento, con sucursales en Norte América, Europa, Sud Africa y Latino América. El Campo Central en Jerusalem provee un completo servicio educacional para más de 550 estudiantes de día completo.


© 1998 Ohr Somayach International. Esta publicación puede ser distribuida intacta a otra persona sin previo permiso. Invitamos a nuestros lectores a incluir nuestro material dentro de otras publicaciones, como revistas comunitarias. Sin embargo, solicitamos que nos soliciten permiso de antemano, y que luego nos envien una copia del ejemplar.


Instituciones Or Sameaj
Calle Shimon Hatzadik #22, Apdo. 18103
Jerusalem 91180, Israel
Tel: 972-2-810315 Fax: 972-2-812890
E-Mail (español):
spanish@ohr.edu
E-Mail (inglés):
info@ohr.edu


Copyright© 1998 Or Sameaj Internacional, Todos los derechos reservados.  Envíenos sus comentarios!
Las publicaciones electrónicas de Judaísmo pueden ser dedicadas en memoria de algún ser querido, o celebrando alguna fecha especial. Póngase en contacto con nosotros para mas detalles.


Ohr Somayach International is a 501c3 not-for-profit corporation (letter on file) EIN 13-3503155 and your donation is tax deductable.