¡Judaismo! - Behaalotejá
Behaalotejá
Resumen de la Parashá
Se le enseña a Aarón el método de encendido de la Menorá en el Mishkán. Moshé santifica a los Levitas para el servicio en el Mishkán. Los Levitas ocupan el lugar de los primogénitos que fueron descalificados debido al pecado del becerro de oro. Después de cinco años de entrenamiento, servirán en el Mishkán desde la edad de 30 a 50 años. Después de esta edad hacen trabajos menos extenuantes. Un año después del éxodo, Dos ordena a Moshé acerca del Korbán Pesaj. Los que perdieron la primera oportunidad de ofrecer el Korbán Pesaj debido a diferentes circunstancias piden una fecha alternativa. A los Hijos de Israel se les enseña sobre Pesaj Sheiní, la segunda oportunidad para ofrecer el Korbán. Dos le señala al pueblo cuando viajar por medio de nubes milagrosas cerca del Mishkán. Dos trompetas de plata son tocadas para reunir a los príncipes del pueblo cuando es necesario hacer algún anuncio. Las trompetas también anuncian planes de viaje, guerra o fiestas. Se especifica el orden en que las tribus viajan. Moshé le ofrece a su suegro que se una a los Hijo de Israel pero él regresa a Midián. Instigados por un grupo de Egipcios que se unieron a los Hijos de Israel a la salida de Egipto, el pueblo se queja del Man. Moshé protesta diciendo que no puede gobernar a la nación por sí solo. Dos le dice que seleccione 70 sabios, el primer Sanhedrín, para ayudarlo y le informa que el pueblo va a recibir carne hasta saciarse y cansarse de ella. Dos hombres del grupo profetizan que Ioshúa va a traer al pueblo a Canaán en lugar de Moshé. Algunos protestan contra estos profetas pero Moshé está contento que ahora hay más profetas. Dos manda al pueblo una cantidad increíble de codornices para aquellos que se quejaron por la falta de carne. Una plaga castiga a los que se quejaron. Miriam hace un comentario constructivo a Aarón insinuando que Moshé es como otros profetas. Dos exlica que la profecía de Moshé es superior a la de cualquier profeta, y castiga a Miriam con Tzaraat (una enfermedad en la piel) por haber hablado lashón hará (hablar mal) de su hermano. Moshé reza por ella y la nación espera que se cure antes de viajar.
Comentario a la Parashá
Hay dos maneras de encender una vela. Uno puede poner la llama directamente en la mecha, o se puede mantener la llama cerca de la mecha hasta que debido al calor empiece a arde.
Hay dos maneras de enseñar Torá y pasar la tradición a la generación siguiente. Podemos educar a nuestros hijos a ser estudiosos de la Torá y cumplir con las mitzvot, o podemos dejar que vean nuestra pasión por la Torá y sus mitzvot. Podemos utilizar todas las técnicas educacionales para inspirarlos hasta que su propio interés en la Torá y sus mitzvot se encienda. Para simbolizar esto, se le ordenó a Aarón encender la Menorá de la segunda manera, ya que la Menorá simboliza a la Torá Oral - la transmisión personal de la palabra de Dos.
Hay una mitzvá de llevar el yugo de las malas épocas con alegría, como si fueran buenos tiempos. Pero esto es sólo para uno mismo. En relación a otras personas, sin embargo, estamos obligados a sentir tristeza y compartir su dolor y rezar con todo nuestro corazón. Es por eso, que durante el viaje por el desierto, los Hijos de Israel tendrían que haber dicho "No me interesa que yo estoy sufriendo de hambre y sed. Llevaré esta carga sobre mí. Pero no puedo ver el dolor de mi prójimo". Sin embargo cuando el pueblo se quejó en el desierto, cada persona se puso en la entrada de su tienda y lloró por su familia y no pensó en su prójimo.
Hay dos clases de humildad, una que es falsa y una verdadera. Una persona que actúa humildemente para que otros la respeten, abandona esa cualidad cuando se da cuenta que otros sienten que su humildad es falsa. Una persona que es verdaderamente humilde seguirá siendo humilde aunque otros supongan que él es orgulloso y vanidoso. Miriam insinuó que Moshé se separó de su mujer porque sobreestimó la importancia de su propio destino. Todos los demas profetas de la generación incluyendo a Miriam, no practicaron el celibato. A pesar de esta acusación Moshé se mantuvo extremadamente humilde, lo que demostró su verdadera humildad.